La joven pareja con dos hijos quería tener una casa en la playa cerca de la ciudad de Santiago. Una porción de tierra en la colina en Matanzas resulta ser el lugar perfecto para el proyecto, con vistas al océano y a los acantilados del pueblo de La Boca de Rapel
Casa en una colina con vistas al océano. Terraza en el centro de la casa al abrigo de los vientos
El estudio Work Arquitectos fue encargado por una familia joven para diseñar una casa con vistas al mar, aprovechando al máximo las vistas, y al mismo tiempo protegida de los vientos, con una terraza ubicada en el centro de la morada
El objetivo principal del proyecto era aprovechar al máximo las vistas panorámicas de los alrededores, sin exponerse demasiado a los vientos del sur. El resultado es una casa con tres áreas independientes que convergen en una terraza en el centro de la casa, protegida por los volúmenes, que no es más que una extensión del comedor y la cocina
Las habitaciones tienen vista al mar, una de las cuales está dispuesta en diagonal para enmarcar la mejor vista. Los interiores tienen una altura considerable, hasta 3,4 metros, como es claramente visible desde el exterior, para enmarcar mejor las vistas externas
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