Shift House nace de la necesidad de una familia de Brooklyn que, después de la pandemia de Covid, sintió la urgencia de tener una casa independiente en medio de la naturaleza. Los plazos y el presupuesto reducidos llevaron a los arquitectos a experimentar con la construcción prefabricada, superando los límites de diseño
El estudio Palette Architecture con la Shift House tiene la oportunidad de probar un enfoque que va más allá de los tradicionales proyectos de arquitectura: la residencia compuesta por módulos prefabricados, meticulosamente estudiada en detalle, es ensamblada en el lugar en solo un día. Tres módulos compuestos por cinco tipos de paneles estructuran la casa que presenta una forma en L
El desafío más grande para los diseñadores fue superar los límites dimensionales que normalmente impone la prefabricación industrial y el transporte de las piezas. El riesgo en estos casos es tener espacios más estrechos y bajos de lo normal. El gran trabajo de Palette Architecture permitió, en cambio, tener un gran espacio diurno de doble altura en el módulo central, y habitaciones espaciosas en los otros dos módulos
La vivienda se desarrolla en 150 metros cuadrados y, una vez montada, se colocan en su lugar los suelos y revestimientos. La casa abraza y protege de la vista de los transeúntes un jardín con una piscina de forma esencial; en el lado de la calle, un patio empedrado con jardín árido para el ahorro de agua
Los interiores están diseñados en conexión visual con el verde en la parte trasera. Las grandes ventanas del módulo de estar permiten que la naturaleza y el cielo entren en la vida diaria. Las habitaciones también dan a un patio ofreciendo un espacio exterior en la zona de descanso. Los muebles de madera crean un hilo conductor en todos los espacios colaborando en la unión de los módulos; las texturas naturales crean una atmósfera serena y relajante
