Un naranjo que huele a bienvenida
Antiguamente era un viejo naranjo, hoy es el corazón latente de una residencia que celebra el proyecto "Una casa en el Mediterráneo", diseñado por los arquitectos Aldo Flore & Rosanna Venezia. En el centro, una piscina recibe a los huéspedes con el aroma de las azahar que se esparce en el aire, creando una atmósfera suspendida entre la naturaleza y el bienestar. Los muebles, elegidos con cuidado y sensibilidad, cuentan historias: algunos provienen de antiguas casas familiares, otros fueron seleccionados por los diseñadores para armonizarse con el alma del lugar, en un equilibrio perfecto entre recuperación y contemporaneidad. Un ejemplo refinado de cómo los proyectos de renovación pueden devolver nueva vida a los lugares, manteniendo intacta su memoria.