Un gesto arquitectónico ligero y consciente
La villa se encuentra en una cresta virgen de 38 acres sin alterar su morfología. Los diseñadores del estudio Swatt + Partners concibieron un camino de entrada largo y sinuoso - 2/3 de milla - que serpentea entre las raíces de los árboles sin tocarlas, acompañado de muros de concreto a la vista que siguen fielmente la topografía. El edificio principal, de 790 metros cuadrados distribuidos en tres niveles, parece ser un volumen flotante que se integra al terreno en lugar de dominarlo.