Renovaciónes
Los proyectos de restauración son aquellos destinados a transformar los edificios mediante un conjunto sistemático de obras que pueden dar lugar a una organización del edificio total o parcialmente diferente al anterior. Estas intervenciones incluyen la restauración o sustitución de algunos elementos constitutivos del edificio, la eliminación, modificación e inserción de otros nuevos.
Las intervenciones de renovación de edificios incluyen diferentes tipos de obras que tienen como objetivo mejorar y modernizar los espacios habitables. Son intervenciones que pueden afectar tanto a interiores como a exteriores, con el fin de modificar la estructura o simplemente dar una versión más moderna a los ambientes.
Entre las intervenciones constructivas más habituales para rehabilitación encontramos::
- modernización de las fachadas, con pintura de las superficies exteriores;
- renovación completa del pavimento;
- instalación de ventanas y puertas con un diseño moderno;
- montaje de sistemas eléctricos y de plomería, con la inserción o reemplazo de sistemas obsoletos;
- creación o demolición de ambientes internos.
Estas son solo algunas de las muchas operaciones que se deben realizar durante una intervención en la rehabilitación de un edificio. Los objetivos perseguidos son principalmente dos: por un lado ampliar/o redimensionar las zonas de estar tanto en los espacios interiores como en las particiones exteriores del edificio; por otro, asegurar altos niveles de eficiencia energética, mediante la instalación de dispositivos como paneles solares o calderas de condensación con muy bajas emisiones contaminantes.
Entre las principales ventajas que generan las intervenciones de rehabilitación de edificios se encuentra sin duda el aumento del valor del inmueble, maximizando el confort interior con el objetivo de permitir una menor producción de residuos de aire y consumo energético.
También es posible realizar intervenciones de restauración arquitectónica que son aquellas que tienen por objeto la recuperación, conservación y puesta en valor de edificios con un valor histórico, arquitectónico y ambiental particular y para estas obras se utilizan materiales y tecnologías distintas de las utilizadas para la construcción del edificio. También se permite la construcción, siempre que no entren en conflicto con el carácter general de este último.