CASA GER 30, en Valencia, recupera su elegante personalidad original tanto gracias al acertado diseño de las molduras de puertas y ventanas, personalizadas para cada estancia, como al estudio del mobiliario y los acabados en un juego entre las opciones vintage y el contraste con el diseño contemporáneo
Clasicismo y diseño, unión e independencia. Contrastes armónicos en una residencia privada
Dos misiones para un proyecto de DG Arquitecto Valencia: recuperar la historicidad de una vivienda de principios del siglo XX, ensombrecida por su anterior uso como oficina, y crear una distribución del espacio capaz de definir dos áreas distintas, armónicamente comunicadas pero independientes
Cada pieza de mobiliario es seleccionada con cuidado e intención por los arquitectos junto con sus clientes. La decoración deja al papel como protagonista de la forma de los espacios y a la estructura histórica de la casa, estucos, molduras, rosetones, puertas dobles y ventanas mirador, realzados por un mobiliario de alto diseño capaz de dialogar con energía, pero sin invadir
Los espacios de la casa están conceptualmente divididos en dos grandes áreas con caracteres distintos. La zona principal es la más amplia y ventilada, iluminada por grandes ventanales que dan a la fachada principal del edificio, e incluye además de la zona de estar también el dormitorio principal con vestidor y baño
La otra zona de la casa, más privada y acogedora, es la dedicada a los hijos de los clientes. La peculiaridad es que la intención de comunicar las dos zonas y mantener su independencia se consigue creando un doble flujo de distribución: uno exclusivo, del dormitorio principal a la zona de estar; otro que relaciona todos los ambientes de forma tradicional
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