Un cofre de ladrillos vidriados inspirado en los reflejos de la luz de la luna sobre la nieve

Diseñado y realizado por el arquitecto Konstantin Ikonomidis, en colaboración con el municipio de Qeqqata, el pabellón Qaammat Fjeld está concebido como un objeto poético y estético, pero sobre todo como un gesto simbólico que reconoce el lugar natural y la rica historia de la cultura groenlandesa

Caracterizado por los dos fiordos que confluyen en el extremo oriental de Sarfannguit, en las colinas, la ubicación del pabellón fue cuidadosamente elegida por la comunidad local, el director del sitio Paninnguaq Fleischer-Lyberth y el arquitecto Konstantin Ikonomidis por su impresionante vista del municipio de Sarfannguit

Uno de los rasgos más distintivos de la estructura de Qaammat es su "cáscara" de vidrio, su juego de transparencias, escala y peso, que da lugar a una sensación de surrealidad. El pabellón Qaammat puede alterar la perspectiva del espectador, fundirse e incluso desaparecer en la topografía circundante

El vidrio camufla el edificio y delinea el paisaje: el pabellón se hace presente, pero permanece casi invisible. El espacio arquitectónico interior desarrolla una intrincada relación con el exterior, y proporciona un espacio interesante y entretenido. Mientras está sentado en el interior, el espectador experimenta el material opaco en combinación con el sol y con la nieve

El pabellón se imagina como un lienzo, que cobrará vida reflejando la paleta de colores de su entorno: el sol, la nieve, las diferentes estaciones, el paso del tiempo. A través de esta multitud de reflejos y abstracciones en el suelo, el pabellón generará el efecto de un espacio mayor y formará diferentes experiencias